La retinopatía de la prematuridad es una enfermedad ocular que se produce en un pequeño porcentaje de bebés prematuros, la cual causa el crecimiento de vasos sanguíneos anormales en la retina, la capa de células sensible a la luz que recubre la parte posterior del ojo que nos ayuda a ver. La imagen de la izquierda muestra ejemplos del crecimiento de vasos sanguíneos normales y anormales.
La retinopatía de la prematuridad se presenta con mayor frecuencia en bebés pequeños con un peso muy bajo al nacer o nacidos en una etapa gestacional más temprana. Por ejemplo, un bebé prematuro de 28 semanas tiene un mayor riesgo de desarrollar retinopatía de la prematuridad que un bebé prematuro de 32 semanas.
En algunos casos, los vasos sanguíneos anormales pueden reducirse en tamaño y desaparecen sin tratamiento. En otros casos, los vasos pueden continuar desarrollándose y problemas graves de los ojos y la visión pueden ocurrir. Por ejemplo:
Miopía (visión corta)
Desprendimiento de la retina
Ambliopía (ojo perezoso)
Estrabismo (ojos desviados)
Glaucoma (aumento de la presión del ojo)
Pérdida de la visión o ceguera
Causas
Los médicos no saben con certeza qué causa una retinopatía de la prematuridad. Los vasos sanguíneos en el ojo suelen finalizar su desarrollo en las últimas semanas antes del nacimiento. Los bebés prematuros, sin embargo, abandonan la protección del útero antes de que los vasos sanguíneos hayan tenido la oportunidad de desarrollarse completamente. Los bebés son expuestos a elementos como medicamentos, altos niveles de oxígeno y luz, y a cambios de temperatura. Estos factores pueden interferir con el desarrollo normal de los vasos sanguíneos del ojo y causar una retinopatía de la prematuridad.
Otros factores que pueden tener un efecto en el desarrollo de la condición incluyen:
Bajo peso al nacer
Uso de oxígeno suplementario después del nacimiento
Deficiencia de vitamina E
Etnicidad (los caucásicos tienen más riesgo de desarrollar la condición que los afroamericanos)
Anemia
Complicaciones respiratorias
La retinopatía de la prematuridad debe ser evaluada en los bebés prematuros, al igual que todas las demás enfermedades de alto riesgo, poco después del nacimiento. Un oftalmólogo (Doctor de los Ojos) puede diagnosticar la retinopatía de la prematuridad durante un examen de los ojos del bebé en la unidad de cuidados intensivos para recién nacidos en un hospital o en la guardería
En ocasiones, la retinopatía de la prematuridad puede no ser detectada hasta varias semanas después del nacimiento. Por lo tanto, los ojos de los bebés prematuros en riesgo de desarrollar una retinopatía de la prematuridad deben ser examinados por un oftalmólogo entre cuatro y seis semanas después del nacimiento. Si una retinopatía de la prematuridad es diagnosticada, los exámenes deben continuarse con regularidad hasta que los vasos sanguíneos anormales desaparezcan por sí mismos, o sean tratados adecuadamente por el oftalmólogo.
Tratamiento de la Retinopatía de la Prematuridad
El tratamiento para problemas de la visión puede incluir (uno o más):
Uso de anteojos
Gotas para los ojos
Aplicación de un parche temporal en un ojo (para el tratamiento de la ambliopía)
Cirugía del ojo
Se debe hacer un seguimiento de problemas de visión a todos los bebés prematuros y a bebés con retinopatía de la prematuridad.
BIBLIOGRAFÍA
Ojos Sanos